Origen de la mordida abierta y tratamiento

La mordida abierta es una alteración de la oclusión, es decir, la forma en que los dientes se unen y alinean. En este tipo de maloclusión los dientes frontales superiores e inferiores permanecen separados cuando la boca está cerrada. El resultado es una separación entre los dientes aun con la mandíbula cerrada. Los problemas que causa no son solamente estéticos sino también dificultades en el habla y la deglución. La mordida abierta puede prevenirse y hasta corregirse en la infancia. ¿Has observado maloclusión en los niños en casa? Entonces lo que sigue es para ti.

Causas de la mordida abierta

En general, la mordida abierta se define como la maloclusión en la que los dientes frontales superiores e inferiores se inclinan hacia afuera para no tocarse cuando la boca está cerrada. Técnicamente hablando se denomina “mordida abierta anterior”.

Este problema tiene varias causas, que por lo general se concentran en tres factores:

• Problemas mandibulares. Pueden corregirse con cirugía, ortodoncia o ejercicios.
• Hábitos. Aquí se incluyen algunos adquiridos en la infancia como empujar la lengua hacia los dientes al tragar o hablar, masticar objetos extraños como lápices o bolígrafos y chuparse el pulgar. También puede ser consecuencia de uso inadecuado de chupete o biberón.
• Cambio de dientes de leche por los definitivos. Mientras conviven dientes de leche y dientes permanentes, estos no coincidirán completamente. A veces solo hay que esperar que el niño cambie todos los dientes.

Prevención y tratamiento de la mordida abierta

La mordida abierta es una de las maloclusiones más comunes y difíciles de tratar. Puede tener diferentes tratamientos según la causa.  En todos los casos, solamente el diagnóstico realizado por un odontólogo podrá proponer las soluciones adecuadas.

La prevención comienza en la infancia. Presta atención al bebé y consulta con el pediatra si se chupa el pulgar. En los niños se debe observar que no empujen la lengua hacia los dientes frontales superiores o inferiores cuando hablan o tragan. La modificación de comportamientos mediante ejercicios o los aparatos ortopédicos pueden resolver el problema.

Tratamiento mediante cirugía y aparatos

La cirugía no se recomienda hasta que los huesos no estén completamente desarrollados.  Sin embargo, lo mejor es tratar el problema en cuanto se observa que los dientes están desalineados. Esto puede ocurrir antes del cambio total de dientes de leche por permanentes, es decir, alrededor de los 7 años de edad.

En adultos el tratamiento consiste en la colocación de aparatos ortopédicos combinados con ejercicios para modificar comportamientos.  De hecho, en esta etapa el tratamiento es mucho más complicado y doloroso. En casos más graves, puede ser necesario el uso de aparatos especiales, como arneses de fuerza para reubicar la mandíbula y alinearla o aparatos que limitan la capacidad de la lengua para empujar contra los dientes frontales.

La cirugía ortognática también es una opción para los adultos cuando otros métodos no han funcionado o cuando se trata de problemas esqueléticos. Este tipo de cirugía permite reposicionar el maxilar superior y mantenerlo en su nueva ubicación mediante placas o tornillos.

La mordida abierta puede causar muchos problemas en la edad adulta. ¡Controla la dentadura de los niños ahora!